"EL PADRE NUESTRO":
LA ORACION "MODELO"
¡Shalom tengan preciosos "llamados de Israel," y benditos sean todos Ustedes dondequiera que estén, en el nombre kodesh del Padre Yahweh y del Hijo Yahushua!
Como siempre, con un tierno y kodesh abrazo les saluda Rafael, siervo y hermano de Yahushua Ja Mashiaj así como de toda la Kejilah, por la misericordia y voluntad de Yahweh.
Nuevamente le damos la bienvenida a todos aquellos "nuevos llamados" que el Padre Kodesh esté trayendo a través de Yahushua a Su Asamblea o Kejilah para recibir el alimento espiritual de la sana doctrina. Ningún otro alimento edificará a un templo de forma KODESH.
Recordemos que sólo la auténtica Kejilah o Asamblea---aquel cuerpo de creyentes presidido exclusivamente por Yahushua---es la única entidad aprobada y conceptuada por Yahweh como "columna y sostén de la Verdad." Esto quiere decir que la Verdad Kodesh no se encuentra en entidades ni en fuentes alternas ni externas al genuino y kodesh Cuerpo de Mashiaj y a la Torah "escrita y viviente."
Amados, sólo la Torah y Yahushua ("el Verbo de Yahweh hecho carne") son LA PALABRA KODESH DE YAHWEH de donde necesitamos nutrirnos. Si vamos a ver, la Sagrada Escritura confirma que el propio Yahushua es "la raíz que nutre todas las ramas," así como aquel que inspiró todos los libros del antiguo Tanakj. Estemos apercibidos en cuanto a que todo lo demás es artimaña y palabra contaminada procedente de Ja Satán el impostor y "engañador de toda la humanidad."
Queridos míos y del Cordero Yahushua, espero que cada semana continúen edificándose mediante las obras rectas dignas de nuestro llamado y vocación, y a través del estudio de la Torah y de los mensajes suministrados regularmente a la Kejilah mediante el Ruaj Ja Kodesh. Yahushua quiere "hacedores" en Su Cuerpo Kodesh, y no solamente "oidores de la Palabra." El desea entrenarnos desde ahora para nuestro futuro rol en el Reino a partir de Su retorno. Después de todo, Yahweh nos está llamando a nosotros ANTES que al resto de la humanidad---y es con un propósito: y esto es ¡que seamos "primicias para El y para Yahushua" en el Reino!
La Torah se nos graba en nuestros corazones de una forma muy peculiar y efectiva cuando la ponemos en práctica. De esta forma Yahushua mora en cada uno de nosotros mediante el Ruaj ja Kodesh---el que el Padre sólo da "a quienes le obedecen." Tengamos en mente que Yahushua no puede morar dentro de alguien que continuamente practique el pecado y no se arrepienta.
Amados míos, Yahushua no puede morar tranquilamente dentro de una persona que de continuo profana su templo. Cuando una persona llamada por Yahweh quiere cometer fornicación y acostarse con una ramera o con un fornicario o sodomita, cada vez que dicha persona se va al lecho con los fornicarios, pretende arrastrar a su cama e inmundicia a Yahushua consigo.
Pero ni ignoremos que ni Yahushua ni el Ruaj Ja Kodesh permanecen obligados a continuar morando dentro de una persona así. Amados míos, no podemos contristar el espíritu--- según el mandato---o de otra manera nos podría abandonar. De manera que manténganse en constante alerta en cuanto a todas estas cosas, dado que estamos en la era de la apostasía, y no se engañe a sí mismo ninguno de Ustedes.
Confío en que hayan hecho un buen hábito de orarle frecuentemente a Nuestro Padre Yahweh, haciéndolo varias veces al día y de forma espontánea y sincera---y si todavía no lo han hecho, les exhorto a que procedan a obediencia sin mayor dilación y saquen unos cuantos minutos (al menos tres o cuatro veces al día); para honrar a Su Padre, demostrarle cuanto lo aman y dependen de El para todo, y para agradecerle por todo lo que cada día El nos da. No nos cuesta nada, preciosos míos, y no tenemos que esperar a estar "en malas" para comunicarnos con El.
Les recuerdo a todos que la oración es el método mas aceptable y a la vez efectivo para comunicarnos con nuestro Padre en cualquier momento y dondequiera que estemos, porque nosotros somos el Templo---y las oraciones provenientes de un corazón limpio, son nuestras ofrendas e incienso grato a El.
Según decíamos en un mensaje reciente, emitido para el pasado Moed de Yom Kippur---día kodesh también conocido como "el gran día del ayuno y la oración"---a partir de la muerte de Yahushua y de El haber calificado como Salvador y Mediador (es decir, como "Kojen Ja Gagol" o "Sumo Sacerdote") por toda la perpetuidad, el velo que separaba el Lugar Santo del Lugar Santísimo del Templo de Jerusalém misteriosamente (y por mano de Yahweh) ¡se razgó de arriba a abajo!
Unas cuantas horas antes de este suceso tan insólito e inquietante, sucedió algo hasta entonces sin precedente: el Kojen Ja Gadol de la religión judío-farisaica sorpresivamente se había descalificado a sí mismo en su malévolo y descontrolado afán por darle muerte a Yahushua, ¡razgándose sus propias vestiduras!
Amados hermanos y hermanas, y llamados en general, a partir de ese profético 14 de Abib por la tarde, el Pueblo judío inconvertido súbitamente había quedado a merced de sus líderes religiosos profanos, sin su principal Kojen Ja Gadol, maldito (por su misma boca) y enceguecido (por Yahweh); y bajo una densa y lúgubre obscuridad que cubrió toda Judea desde "la hora nona" (las tres de la tarde)---¡y en unos cuantos años mas quedarían sin Templo y sin soberanía ni acceso a su propia tierra, al ser arrasados por los romanos como castigo de Yahweh!
(Pueden repasar parte de toda esta serie de eventos leyendo los capítulos 26 y 27 del Libro del apóstol Mattiyahj, o leyendo el análisis línea por línea que hemos publicado gratuitamente y que lleva por título, "¿Quién Asesinó a Yahushua Ja Mashiaj?")
Antes de irse de regreso al cielo con el Padre "a prepararnos un lugar" con ellos dos, Yahushua Ja Mashiaj nos dejó varios legados y bendiciones a quienes nos arrepintiésemos. Entre éstos, nos proveyó un maravilloso bosquejo acerca de como dirigirnos a Nuestro Abba Yahweh cuando nos enseñó aquella insustituíble "oración-modelo" popularmente conocida como "el Padre nuestro," un día en el que un discípulo suyo---al verle orar---le rogó: “Maestro, enséñanos a orar” (Lucas 11:1).
En ese entonces cuando Yahushua todavía ministraba en la Tierra, debemos de tener en claro que lo único que quedaba en la eretz como Pueblo de Israel era solamente el Reino del Sur (la "Casa de Yahjudah"). El resto de las doce tribus (las diez tribus del Reino del Norte, también llamadas las "tribus perdidas") habían desobedecido a Yahweh mas de 700 años antes, y subsiguientemente habían sido arrancadas de su propia tierra por Asiria como castigo de Yahweh. Desde entonces en parte de la eretz ("tierra") sólo quedaba La Casa de Yahjudah (o Judá) y lamentablemente la misma hacía mucho tiempo había perdido la relación paterno-filial que debería exisitir entre todo verdadero israelita y Su Creador.
Como bien sabemos---porque la Escritura así nos lo confirma---la religión rabínico-farisaica había usurpado el lugar de Yahweh el Padre, por lo cual los judíos contemporáneos a Yahushua tenían una RELIGION acerca del Padre, mas NO una RELACION con El. A través del bosquejo en esta "oración-modelo," Yahushua pretendía que aprendiéramos los fundamentos generales acerca de como dirigirnos a Yahweh, restaurando aquel esencial lazo en la comunicación entre hijo y padre que se había perdido.
Contrario a lo que hoy piensa la mayor parte de la cristiandad, Nuestro Salvador, Rey y Mediador Yahushua Ja Mashiaj NO nos ordenó a memorizarnos las palabras de la "oración-modelo" de forma verbatim para luego RECITARLAS cada vez que fuéramos a orarle a Nuestro Padre Celestial.
Veamos rápidamente las palabras que Yahushua pronunció a su discípulo, según aparecen traducidas en las principales Biblias, y, tomando en cuenta que las podemos leer en menos de UN minuto, analicemos si esto que Yahushua habló se trata de una simple oración, o si se trata de algo mas:
"Padre nuestro que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu Reino;
hágase tu voluntad
en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal. Amén."
Si se trata de una oración, amigos míos, la misma no dura ni un minuto antes de que la concluyamos con un AMEN.
Para ser mas exactos, amados míos, ¡dura 18 SEGUNDOS! Esto supone un gran problema. Existen pasajes que comprueban que Yahushua y sus discípulos oraban por horas, ¡no por segundos!
¿Acaso Yahushua el Hijo de Yahweh nos ordenó a nosotros que recitáramos 18 segundos de palabras repetitivas y monótonas a Nuestro Padre cada vez que fuéramos a orar?
Difícilmente.
A pesar de que la iglesiandad romana convirtió las palabras de Yahushua en un REZO que dicho en voz normal apenas dura unos 18 segundos, ¡esa nunca fue la intención de Yahushua Nuestro Mashiaj! Recordemos queridos míos que generalmente la sana doctrina se encuentra dispersa en varios lugares dentro de las Sagradas Escrituras---según había sido profetizado en Isaías 28. Este pasaje indica que debido a nuestra desobediencia, de ahí en adelante la Verdad nos sería dada:
"Precepto sobre precepto, mandato sobre mandato, línea sobre línea, renglón sobre renglón, un poquito aquí, otro poquito allá. En verdad, con tartamudez de labios y EN LENGUA EXTRANGERA, EL HABLARA A ESTE PUEBLO."
Y recordemos, queridos míos, que El NO da Su Verdad, NO dá Su interpretación, NO enseña conocimiento, NO dá entendimiento, ni a "los recién destetados" ni a "los recién quitados de los pechos..." Así mismo lo afirma la Escritura.
EL "lo revela y lo dá" a los obedientes, y a los maduros y ejercitados en el alimento SOLIDO.
Por eso nosotros, los que procuramos ser Sus fieles kodeshim, NO acostumbramos hacer doctrina con tan sólo UNO o DOS versículos ni pasajes.
Lo que aprendemos y enseñamos en la genuina Kejilah es sólo "la SANA DOCTRINA" derivada de la obediencia a los mandamientos y a los mitzvot tales como el que aparece en Isaías 28:10. Esa es la diferencia entre la verdadera KEJILAH de Yahushua guiada por el Ruaj Ja Kodesh "hacia toda Verdad," y el resto de las kejilhot, congregaciones, iglesias, sinagogas, asambleas, yeshivas, etc., que NO OBEDECEN ESTOS PRINCIPIOS, y que se fundamentan en "verdades a medias" o de plano CONTAMINADAS.
"El Padre Nuestro" nos provee un BOSQUEJO idóneo para "la oración del diario." Nuestro hermano y Salvador Yahushua quiso indicarnos varios elementos esenciales que no deben de faltar en una oración normal o general, o por decirlo así, "del diario." Amados, vayamos brevemente a ver exactamente que fue lo que le contestó Yahushua a su discípulo antes de revelarle la famosa "oración modelo":
"Y les dijo: 'Cuando oréis, DECID: Padre nuestro que estás en el cielo...etc., etc."
Yahushua con esto dijo, parafraseando, "Cuando vayan a Yahweh, procuren decir o incluír algo por el estilo a estas palabras en su oración." Esto es lo que realmente significa 'Cuando oréis, DECID: Padre nuestro que estás en el cielo...etc., etc."
Yahushua NO DIJO: 'Cuando oréis, REPETID: Padre nuestro que estás en el cielo...etc., etc."
Hay una gran diferencia entre ambas expresiones arriba, queridos míos. Nuestro Novio y Rey Yahushua está hablándonos acerca de CONCEPTOS detrás de unas palabras---NO de las palabras en sí.
"El Padre Nuestro" no es una oración per-se, sino que es un guía para nuestras propias oraciones personales. En esa oración-bosquejo, Yahushua nos provee varios conceptos fundamentales que debemos de incluír cuando generalmente oramos. De manera que en este particular caso no importa realmente cuan correctamente traducidas puedan estar las palabras, o no. Lo que nos concierne realmente son los conceptos o ideas que tales palabras nos ilustran, y un poco mas abajo los vamos a examinar.
Ahora bien, amados hermanos y llamados de Yahweh, antes de proseguir, dejemos en claro dos cosas muy importantes:
1) Las palabras incluídas por Yahushua en la oración-modelo no aparecen ahí a exclusión de otras palabras o ideas reveladas en la Torah de acuerdo a Isaías 28, y
2), al contestar a su discípulo en ese pasaje del Libro de Lucas, Yahushua Ja Mashiaj está ASUMIENDO de nosotros algo muy importante: que somos Sus VERDADEROS y FIELES SEGUIDORES.
Queridos míos, Yahushua se está dirigiendo a un verdadero discípulo Suyo---posiblemente incluso al propio Lucas. Independientemente de quien haya sido ese discípulo, a través de él Nuestro Amo se está dirigiendo a cualquiera que también sea Su verdadero discípulo. Nosotros somos sus verdaderos discípulos---si es que realmente nos esforzamos por serlo---y como tal, Yahushua correctamente asume que NO estamos constantemente recayendo en pecado y necesitando de otro tipo de oración (y posiblemente ayuno).
"El Padre Nuestro" es un bosquejo muy apropiado para nuestras oraciones generales y cotidianas cuando estamos en situaciones espirituales NORMALES (i.e., NO ESTAMOS EN PECADO). Estar en condición pecaminosa es una situación excepcional, y NO es la regla o situación general y normal de un verdadero creyente y seguidor promedio de Yahushua (que se SUPONE que no esté en pecado como cuestión NORMAL de su vida).
¿Cómo sabemos que las palabras de "el Padre Nuestro" no bastan, ni incluyen todo, ni constituyen todo lo que tenemos que decir siempre que le oramos a Yahweh?
Lo sabemos porque las Palabras de Yahushua no apuntan hacia situaciones específicas por las que generalmente acudimos al Padre en oración. Apuntan a cosas muy generales. Yahushua pretende que a ese maravilloso bosquejo Suyo le añadamos nuestro toque genuino y personal cuando hablemos con Nuestro Abba Yahweh o con El. Salmos 37:4 nos instruye: "Pon tu delicia en Yahweh, y El te dará las peticiones de tu corazón."
Por ejemplo, en "el Padre Nuestro" no hay referencia alguna a sanación por enfermedad, ni a la oración por nuestros hermanos, ni tampoco a pedidos de protección ni ayuda relativas a nuestros enemigos, etc. Esto se debe a que las palabras de Yahushua citadas por Lucas y Mateo no incluyen TODA la doctrina en lo referente a las oraciones, sino solamente lo básico. ¡Las palabras en Lucas 11:2 NO son exclusivas de lo revelado en el resto de la Torah!
Claramente, en otros textos de la Escritura aparecen referencias a orar por nuestros enemigos, por ejemplo, a pedir por la Kejilah y por nuestros hermanos (ver Lucas 22:32 "pero yo he rogado por ti para que tu fe no falle"); pedir por sabiduría (Santiago 1:5 "Pero si alguno de vosotros se ve falto de sabiduría, que la pida a Yahweh, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada"), y pedir "todo lo que pidamos en el Nombre de Yahushua" para que nos sea dado. Ciertamente las palabras que leímos en "el Padre Nuestro" no proveen para nada de esto.
¿O acaso termina Yahushua Ja Mashiaj la oración-modelo con estas palabras: "Todo esto te lo pedimos en el nombre kodesh de Tu Hijo---Nuestro Hermano y Salvador---Yahushua Ja Mashiaj. Así Sea"?
Obviamente NO. No hay nada parecido a eso al final de lo que aparece escrito en torno al "Padre Nuestro." En esa ocasión Yahushua terminó de hablar diciendo:
"Y no nos metas (no nos dejes caer) en tentación, sino líbranos del mal (del maligno). Porque Tuyo es el reino y el poder y la gloria para siempre. Así sea.'"
Ahí no dice "Todo esto te lo pedimos a nombre de Tu Hijo Yahushua Ja Mashiaj," sin embargo, en la Sagradas Escrituras se nos comanda a pedir todas las cosas a nombre de Yahushua.
En Juan 14:13 el texto lee así, hablando Nuestro Amo Yahushua: "Y todo lo que pidáis en Mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo."
Amados míos y de Yahweh, ¿por qué entonces en "el Padre Nuestro" no aparece Yahushua diciéndonos que todo eso que pidamos a Yahweh cuando oremos, se lo pidamos en Su Nombre? ¿Acaso Yahushua está quebrantando Su propia palabra?
¡De ninguna manera!
Amados míos, la razón es porque Yahushua estaba plenamente conciente del mandato profetizado en Isaías 28:10, y El no estaba dispuesto a quebrantarlo. Yahushua Nuestro Amo y Soberano se adhiere a la Palabra escrita porque El jamás habló Su propia palabra; y además El la magnifica o le dá mayor cumplimiento, por lo cual Yahushua también nos revela el resto de lo que nos tiene que decir respecto a la oración (y respecto muchos otros temas), "un poquito aquí, otro poquito allá." El texto en Juan 14:13 no contradice para nada el resto de la Torah: LO MAGNIFICA. Es decir, nos porvee mas información y mas detalle.
En otros lugares aparte de Lucas 11:2, la Torah nos provee otros detalles y ejemplos de oraciones y de actitudes apropiadas para lidiar exitosamente cuando estemos atravesando condiciones espirituales extraordinarias que no están cubiertas en "el Padre Nuestro," tales como cuando hemos pecado y queremos orarle a Nuestro Abba. La sana doctrina nos muestra que tenemos que purgar ese pecado primero. Nos tenemos que CONCILIAR CON EL, antes de dirigirnos a Nuestro Padre Yahweh, a diferencia de como lo haríamos cuando no tenemos pecado alguno y nuestra situación espiritual es una ordinaria.
La Escritura nos enseña a "dejar nuestra ofrenda en el altar" e ir a conciliarnos y borrar el pecado, y cuando lo hayamos hecho, regresar al altar a ofrecerla a Yahweh. En "el Padre Nuestro" no hay provisión para esto, lo cual comprueba que es un tipo de bosquejo o de oración general-cotidiana, y NO una oración para circunstancias espirituales excepcionales. Yahushua nos brinda información extra en muchos otros lugares de la Escritura, para instruírnos respecto a los pasos a seguir para obtener el perdón de Yahweh. Primero en Marcos 11:25 revela:
"Y cuando estéis orando, perdonad si tenéis algo contra alguien, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone vuestras transgresiones."
La enseñanza aquí es perdonar a los que hayan pecado contra nosotros, para que Yahweh nos perdone en esa misma medida. Si no estamos dispuestos a perdonar, Yahweh tampoco nos va a perdonar. Mateo 5:23-24 nos lo confirma cuando nos deja entrever que Yahweh no aceptaría nuestra "ofrenda":
"Por tanto, si estás presentando tu ofrenda en el altar, y allí te acuerdas que tu hermano tiene algo contra ti, deja tu ofrenda allí delante del altar, y ve, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda."
Estos dos pasajes que acabamos de leer nos muestran que antes de ir a Yahweh, 1) no podemos tener pecado propio que no querramos o no podamos expiar, 2) no podemos presentarnos ante Yahweh si recordamos que hemos pecado contra alguien y no hemos puesto remedio, y 3) no podemos esperar el perdón de Yahweh si no hemos querido perdonar a algun semejante.
De manera que el proceso a seguir, según esos dos pasajes, sería: 1) ir a quien ofendimos y pedirle perdón, 2) perdonar a quien nos haya ofendido, y finalmente, 3) presentarnos ante Yahweh para orarle y que nos perdone cualquier otro pecado oculto. De esta forma, nuestra ofrenda (oración) es acepta a Yahweh. De otra forma no lo sería. Profetizó Yahweh por boca de Isaías:
"Sus holocaustos y sus sacrificios serán aceptos sobre Mi altar; porque mi casa será llamada casa de oración para todos los pueblos."
Entonces, de mas está decir, que en "la Casa de Oración" debemos de aprender a orar para que nuestras oraciones (ofrendas, sacrificios u holocaustos) sean aceptos sobre Su altar. Mediante los conceptos provistos mediante la oración-bosquejo conocida como "el Padre Nuestro," Yahushua nos comprueba e instruye que podemos acercarnos al Padre con plena confianza, porque El, nuestro Redentor mismo, nos introduce como nunca antes en la presencia del Padre, y Su Espíritu hace de nosotros hijos de Yahweh en una relación íntima con El. ¿Que prefiere Yahweh, según El mismo nos revela?
"Obediencia quiero, y no sacrificio."
Yahweh ante todo prefiere que seamos obedientes, amados míos. ¡El para nada interesa nuestros sacrificios si estamos en desobediencia!
Por todo esto que hemos expuesto, podríamos usar el bosquejo del Padre Nuestro, para basar nuestras oraciones, e incluso citar de vez en cuando sus palabras "verbatim" con confianza sencilla y filial, gozosa seguridad y humilde audacia, con la certeza de ser amados y escuchados por Nuestro Abba---SI EN VERDAD LO HACEMOS DE FORMA TOTALMENTE CONCIENTE Y SINCERA.
Pasemos ahora a analizar los conceptos que Yahushua nos quiere mostrar y transmitir mediante Sus palabras:
"Y aconteció que estaba Él orando en cierto lugar, y cuando terminó, uno de sus discípulos le dijo: Amo, enséñanos a orar, así como también Juan enseñó a sus discípulos."
A partir de este versículo, aquí se inicia ahora la oración-bosquejo que conocemos popularmente como "el Padre Nuestro."
"Y les dijo: Cuando oréis, decid: Padre nuestro que estás en el cielo; santificado sea Tu Nombre..."
Lo primero que Yahushua nos quiere decir que debemos de hacer es alabar a Yahweh. Cuando nos dirigimos a El, primero lo saludamos honrándolo y bendiciendo Su Kodesh Nombre. Cuantas veces nos salga del alma hacerlo de forma sincera y genuina, es apropiado y es acepto por El. Podemos alabarlo y honrarlo de muchísimas maneras con nuestros labios, y mientras mas lo hagamos, mas concientes estaremos de la importancia que tiene hacerlo con nuestras acciones para no quedar como hipócritas ante El.
"Venga tu reino."
Otras de las cosas mas importantes por las que debemos de orar y tener en mente es el deseo de que el Reino Celestial de Yahweh venga pronto a la Tierra. Como sabemos, el Reino viene con Yahushua, y antes de su arribo, habrán 7 años de Tribulación---incluyendo tres de GRAN TRIBULACION, cuyos días, "si no fuesen acortados, nadie se salvaría."
Recordar y desear la instauración del Reino nos fortalece y nos da esperanza para soportar lo que pueda sobrevenirnos antes. Las ramificaciones de este maravilloso concepto son casi infinitas, y mientras mas abundemos en ellas mientras oramos, mas listos y mejor preparados estaremos para recibir a Nuestro Amo y Soberano el día de Las Bodas del Cordero...
"Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra."
Mediante este otro concepto, Yahushua quiere que estemos concientes de que Yahweh está en control de TODO. Por eso tenemos que estar SUMISOS a El y deseosos de cumplir Su voluntad. Cuando el Reino del Cielo ya esté en la Tierra, entonces Su voluntad se estará haciendo en la Tierra de forma ininterrumpida y sin obstrucción ni interferencia demoníaca. Mientras tanto, nosotros somos Sus Primicias y lo obedecemos averiguando cual es Su Voluntad y obedeciéndola desde AHORA.
"El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy."
Yahushua desea con esto que veamos los conceptos del alimento físico y del alimento espiritual. Debemos desear ser instruídos por la Palabra ("el agua y el pan de vida") diariamente, así como necesitamos comer comida literal diariamente. Puesto que, “no sólo de pan vive el hombre, sino de todo lo que sale de la boca de Yahweh.” (Matt 4:4)
"Y perdónanos nuestras deudas (pecados/ofensas), así como nosotros perdonamos a todos los que nos deben (ofenden/pecan contra nosotros)."
Mediante este otro concepto Yahushua nos muestra la importancia superlativa que tienen la misericordia y la compasión en nuestro carácter. Si no estamos dispustos a perdonar a otros, Yahweh tampoco nos perdonará, de manera que mas nos conviene PERDONAR. La moraleja ilustrada en este concepto es que no podemos exigir de otros lo que nosotros mismos no estamos dispuestos a dar.
La referencia a pecado hecha aquí por Yahushua es una muy generalizada, y no trata sobre ningún pecado de comisión en particular del que necesariamente estemos concientes de haber cometido. El concepto se aplica igual a pecados de omisión. La idea detrás de todo esto es estar LIMPIOS ante Yahweh siempre, y mantenernos limpios pidiendo constante perdón "por si acaso" hubiésemos pecado.
Este concepto es afín a una referencia muy paralela concerniente a los sacrificios que el fiel siervo Yob hacía diariamente, "por si acaso había algún pecado" en su casa, lo cual deja en claro que no necesariamente tenemos que estar seguros de haber pecado para pedirle a Yahweh que nos perdone. Vayamos al pasaje de Yob el siervo FIEL de Yahweh.
"Yob ... se levantaba de mañana y ofrecía holocaustos conforme al número de todos ellos. Porque decía Yob: "Quizá habrán pecado mis hijos, y habrán blasfemado contra Yahweh en sus corazones."
A veces podemos tener pecados ocultos, o haber consentido a pecados de segundas o terceras personas. Por eso es de sabios pedir perdón a Yahweh por cualquier falta cometida, aunque no estemos concientes de ello. A esto es a lo que Yahushua se refiere cuando nos instruye a pedirle a Yahweh que nos perdone nuestras ofensas según nosotros hemos perdonado a otros. Nuevamente, este es un concepto amplísimo, sobre el cual nos conviene meditar y escudriñar cuando nos comuniquemos con Nuestro Abba Yahweh en oración.
"Y no nos metas (no nos dejes caer) en tentación, sino líbranos del mal (del maligno)."
Antes de despedirnos de Nuestro Abba Yahweh en una oración, Yahushua nos exhorta a que pidamos a Yahweh que nos mantenga KODESH o LIMPIOS. Segundos antes estuvimos pidiendo a Yahweh que nos perdonara los pecados. Ahora le pedimos MAS: que no nos permita pecar en ellos, QUE NOS LIBRE DE TENTACIONES. Yahushua ya pidió eso mismo por nosotros en Juan 17:15:
"No te ruego que los saques del mundo, sino que los guardes del maligno."
1 Corintios 10:13 nos asegura que podemos escapar de la tentación. No tenemos que convertir la tentación en un pecado mas como nos sucedía antes de haber sido llamados:
"No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea común a los hombres; y fiel es Yahweh, que no permitirá que vosotros seáis tentados más allá de lo que podáis soportar, sino que junto con la tentación proveerá también la vía de escape, a fin de que podáis resistirla."
También 2 Tesalonicenses 3:3 nos consuela, asegura y confirma: "Pero fiel es Yahweh quien os fortalecerá y protegerá del maligno."
Pedimos a Yahweh el Padre que no nos deje solos y a merced de la tentación. Pedimos al Espíritu saber discernir, por una parte, entre la prueba---que nos hace crecer en el bien---y la tentación, que conduce al pecado y a la muerte; y, por otra parte, entre ser tentado y consentir en la tentación. Esta petición nos une a Yahushua, que ha vencido la tentación exitosamente con su oración---y con ayuno. Pedimos a Yahweh y a Yahushua la gracia de la vigilancia y de la perseverancia final.
"Porque Tuyo es el reino y el poder y la gloria para siempre. Así sea.'"
Por último, Yahushua nos provee el concepto de una DESPEDIDA. Terminamos tal como empezamos, alabando y glorificando a Nuestro Abba Yah.
Debemos de despedirnos de Nuestro Abba de una forma apropiada, sumisa y amorosa. Las palabras aquí arriba son tan sólo un resumen de lo que debemos de decirle a Yahweh antes de despedirnos. Además, debemos de darle las gracias una vez mas, y asegurarnos de que verdaderamente hemos dejado todo enteramente en Sus manos, hasta sentirnos aliviados y confiados de haberlo hecho, porque al hacerlo sabemos fuera de toda duda que en mejores manos no podemos haber quedado.
Hacer eso nos debe dejar un dulce sabor en los labios, un sentimiento de una paz gozosa y armoniosa, y una complacencia abarcadora que nos confirma que podemos abandonar la Kodesh Presencia de Nuestro Abba en plena confianza....sabiendo que todo estará BIEN...hasta la próxima vez que hablemos con El. Yahweh nos deja con este maravilloso sentir descrito en Isaías 56:5:
"les daré en mi casa y en mis muros un lugar, y un nombre mejor que el de hijos e hijas; les daré nombre eterno que nunca será borrado."
Nosotros quedamos gozosos y confiados, tal como se indica en el siguiente pasaje:
"En gran manera me gozaré en Yahweh, mi alma se regocijará en mi Elojim; porque El me ha vestido de ropas de salvación, me ha envuelto en manto de justicia como el novio se engalana con una corona, como la novia se adorna con sus joyas." Isaías 61:10
Después de haber estado en Su Presencia tan maravillosa, terminada la oración, muchos "llamados de Yahweh" dicen 'Amén'---refrendando por medio de este Amén, que significa simplemente “Así sea,” lo que contiene la oración que Yahweh nos enseñó mediante Su Hijo.
En fin, a través de toda esta travesía por las páginas de la Torah y mediante el Ruaj Ja Kodesh, ya vimos que una verdadera oración con nuestro Padre Creador requiere mucho mas que los 18 segundos que tomaría recitarle el "Padre Nuestro."
"MI CASA SERA LLAMADA CASA DE ORACION PARA TODAS LAS NACIONES"---ahí no dice "CASA DE REZOS," ni "CASA DE REPETICIONES."
Procuremos ser de los de comportamiento mas celoso, ardiente, humilde, temeroso y fiel. Esforcémonos por aprender a orar en conformidad a la Torah y aceptación a los ojos de Yahweh y no a los ojos de los hombres religiosos "que tienen ojos y no ven" y "oídos pero NO OYEN."
Amorosamente, se despide de Ustedes, su hermano y servidor en Yahushua Ja Mashiaj,
Rafael